2011/01/05

Deberías decirme algo...

... Bueno, tal vez, a tu forma, ya lo estés haciendo.

Voy a aprovechar la noche para acercarme a ti, tocarte. Sé que no dirás nada. Es como si me estuvieras esperando, como si quisieras que yo te empiece a recorrer de un lado a otro. Pero no me dices nada.

Y voy a hacerlo. No pienso esperar a que me llegue una gran frase o una gran historia que llevar a ti, no pienso esperar a saber como acabará todo, ni voy a darte razones para acercarme a ti.

Ya no me importan tanto los comienzos, me importa más vivir que lamentar. Me importa más el camino que la meta, arriesgarme que callar.

Nos pasamos la vida esperando que alguien nos haga todo, esperando una llamada que no llega o a una persona que no existe, soñando lo que no nos atrevemos a vivir o viviendo sin atrevernos a soñar

Nos pasamos la vida complicando lo sencillo, cultivando miedos por las esquinas, dejándonos llevar por la corriente o el “qué dirán”.

Creo que ya es suficiente. Hoy, ya te lo anuncio, no pienso buscar razones, tan sólo quiero acariciarte, recorrerte, saborear cada rincón de ti.

Déjate querer, página en blanco, déjate querer.

Prometo... no hacerte daño.

4 comentarios:

  1. Marco l’hora
    -el bolígraf Bic em taca els dits-
    i l’agenda és plena.
    S’ha de posar una nova feina.

    No hi cap res més però insisteixes.
    Ni les línies tan juntes, juntetes, són dissuassòries.

    El diumenge no arriba mai.
    Maleït Destí rutinari!

    Caldrà saludar amb estima al porter,
    llançar una broma per trencar la monotonia.
    Mirar al sol en la sortida del migdia,
    comprar xocolata per convidar la veïna...
    Fer més versos fàcils de rima.

    I arribarà el regal. Segur.

    Un somriure de la meva neboda,
    un missatge inesperat.
    Un petó sense buscar-lo
    una cançò plena de records.

    Un regal que es rep o es dòna.

    Detalls de vida.

    ResponderEliminar
  2. A mí también, como a Agueda, me ha encantado el poema del papel.

    Está excelentemente conseguido, de manera que uno piensa que es un hombre que se dirige a su amada o a la inversa o en cualquiera de las actuales variantes del amor. El golpe de efecto del final descubriendo que es un escritor que desea recorrer, tocar, amar la hoja en blanco me parece genial.

    Un saludo de Agustín.

    ResponderEliminar